viernes, 26 de septiembre de 2008

75 Años de Susan Sontag

(Quinta Entrega) Ver en Blog de Alfredo Rubio-Bazán: "Arlequibre": http://www.arlequibre.blogspot.com


Susan Sontag en Roma. Foto de Guglielmo Coluzzi.
¿Qué hemos hecho?

Por Susan Sontag
(..) Uno se pregunta cómo alguien puede sonreír frente al sufrimiento y la humillación de otro ser humano - ¿arrastrar a un hombre iraquí por el piso, con una correa? ¿poner perros guardianes en los genitales y en las piernas de prisioneros desnudos, temblando de miedo? ¿violar y someter a la sodomía a los prisioneros? ¿forzar a prisioneros encapuchados y engrillados a masturbarse a simular o a realizar actos sexuales entre ellos? ¿golpear a los prisioneros hasta causarles la muerte? - y uno se siente ingenuo por hacer las preguntas, ya que la respuesta es, evidentemente: la gente le hace estas cosas a la gente. No sólo en los campos de concentración Nazis y en Abu Ghraib cuando estaba gobernada por Saddam Hussein. Hay estadounidenses también quienes las hacen cuando tienen permiso. Cuando se les dice o se les hace sentir que aquellos sobre los cuales tienen poder absoluto merecen ser maltratados, humillados, atormentados. Ellos las realizan cuando se les hace creer que las personas que están torturando pertenecen a una raza o religión inferior, despreciable. Porque el significado de las fotografías no es sólo que se llevaron a cabo estos actos, sino que los ejecutores no tenían la sensación de que había algo malo en lo que las fotos muestran. Aún más espantoso, ya que las fotos se tomaban para hacerlas circular y que fueran vistas por mucha gente, todo era diversión. Y esta idea de diversión es, por desgracia, cada vez más - contrariamente a lo que el Sr. Bush le dice al mundo - parte de "la verdadera naturaleza y corazón de los Estados Unidos".

Polémica Sobre el Socialismo Real / Por Susan Sontag
El discurso que Susan Sontag pronunció el 6 de febrero en un acto de apoyo a Solidaridad en el Town Hall de Nueva York desató una viva polémica en la izquierda norteamericana. Vuelta reproduce ahora ese discurso y los comentarios de Phillip Green. Diana Trilling, Aryeh Neier. Daniel Singer. Andrew Kopkind, David Hollinger, Phillip Pochoda y Christopher Hitchens que fueron publica dos por The Nation el 27 de febrero de 1982.
La prosa de una poeta / Por Susan Sontag
La prosa de los poetas suele ser elegiaca, retrospectiva. Como si el tema evocado se remontase, por definición, a un pasado desaparecido. La ocasión acaso sea una muerte literal: los recuerdos de Voloshin y Biely. Aunque no es la tragedia del exilio, ni siquiera la atroz privación y el sufrimiento que Tsvietáieva toleró ya exiliada y hasta el momento en que volvió en 1939 a la Unión Soviética (donde, ya en su exilio interior, se suicidó en agosto de 1941), lo que explica el registro elegiaco. En prosa, el poeta siempre está lamentando un Edén perdido; rogándole a la memoria que hable, o que solloce. La prosa de un poeta es la autobiografía del ardor. Toda la obra de Tsvietáieva es una apología del rapto; y del genio, es decir, de la jerarquía: una poética de lo prometeico. «Toda nuestra relación con el arte es una excepción en favor del genio », escribió Tsvietáieva en su estupendo ensayo «El arte a la luz de la conciencia». Ser poeta es un estado del ser, del ser enaltecido: Tsvietáieva se refiere a su amor por «lo superior». El mismo tono de elevación emocional está presente en su prosa y en su poesía: no hay escritor moderno que nos aproxime más a una experiencia de lo sublime. Como señala Tsvietáieva: «Nadie ha entrado dos veces en el mismo río. Pero ¿hay acaso alguien que haya entrado dos veces en el mismo libro?»
Perpetuo: Vigencia de Victor Serge / Por Susan Sontag
(Segunda Parte)
Los camaradas trotskistas habían sido los defensores más activos de la liberación de Serge, y mientras Serge daba en Bruselas su adhesión a la Cuarta Internacional —como se denominaba a la liga de partidarios de Trotski— sabía que la propuesta del movimiento no era una alternativa viable a las doctrinas y prácticas leninistas que habían llevado a la tiranía estalinista. (Para Trotski, el crimen consistía en que se estaba ejecutando a la gente equivocada.) A su partida de París en 1937 le siguió una disputa manifiesta con Trotski que, desde su reciente exilio mexicano, denunciaba a Serge como anarquista encubierto; por respeto y afecto, Serge se negó a rebatir el ataque. Impávido ante la calumnia de ser tenido por un renegado, un traidor a la izquierda, publicó más tratados y opúsculos a contracorriente acerca del destino de la revolución desde Lenin hasta Stalin, y otra novela, Medianoche en el siglo (1939), situada casi siempre en un pueblo remoto parecido a Orenburg cinco años antes y al cual habían sido deportados los miembros perseguidos de la oposición de izquierda. Es sin duda la primera descripción en una novela del Gulag, o con más propiedad gulag, el acrónimo del vasto imperio penitenciario interno cuyo nombre oficial en ruso se traduce como Administración General de Campos. Medianoche en el siglo está dedicado a los camaradas del partido radical más honorable de la República española, el disidente comunista —es decir, antiestalinista— Partido Obrero de Unificación Marxista (POUM), cuyo dirigente, Andreu Nin, ejecutado por agentes soviéticos en 1937, era otro amigo íntimo de Serge.
Tres elegías por Susan Sontag / Por Ellen Willis
1. Arte: Según el punto de vista de Sontag, la influencia de los principales intérpretes del canon modernista, Marx y Freud, había ido más allá de su utilidad real. Para ella, el cine era "la más viva, apasionante e importante de todas las formas artísticas actuales", pues su viva inmediatez desalentaba los intentos de interpretación.
2. Política: Susan Sontag creyó que los intelectuales debían pronunciarse políticamente. Participó activamente en el movimiento contra la guerra de Vietnam. Intentó, con pasión y persistencia, despertar las conciencias de Estados Unidos y Europa contra la catástrofe genocida en Bosnia. Y, sin embargo, yo no diría que Sontag fuese una pensadora política. Para Sontag, la política era un territorio en el que había que actuar con un elevado estilo moral. O, en otro de sus aspectos, un territorio en el que el escritor debía defender valores literarios, valores de civilización, cuando se encontraban asediados, como lo estaban en Sarajevo. Era una cuestión de voluntad. Sin embargo, la política se refiere sobre todo a estructuras sociales, comportamientos colectivos –o psicología de masas– y a la relación entre ambas cosas. La política es un asunto de conocimiento y de poder.
3. Muerte: Cuando los clichés (es decir, las metáforas añejas) sobre la precariedad de vida se presentan de repente como la verdad simple e irresistible, esto ocupa toda la mente. ¿Cómo fomentar de la mejor manera posible la propia recuperación y cómo vivir mientras tanto? ¿Dedicamos todas las energías a seguir adelante, para que no nos domine la enfermedad, o revisamos las prioridades, centrándonos en lo más importante y desechando lo demás? Te preguntas qué es lo más importante: ¿el amor, el trabajo, el prestar atención a las sensaciones preciosas de la vida? ¿Hay que hacer de la salud un proyecto central, o bien hay que negarse a la obsesión?
Acercamiento a Artaud / Por Susan Sontag
(Tercera y Última Parte)
Los valores de la cordura no son eternos ni «naturales», así como no hay un significado evidente, de sentido común, en la condición de ser demente. La percepción de que algunas personas están locas forma parte de la historia del pensamiento, y la locura requiere una definición histórica. Locura significa no tener sentido, significa decir lo que no debe tomarse en serio. Pero esto depende por completo de cómo una cultura determinada define el sentido y la seriedad; las definiciones han variado mucho a lo largo de la historia. Lo que se llama demente denota aquello que en la determinación de una sociedad particular no se debe pensar. La locura es un concepto que fija límites; las fronteras de la locura definen lo que es «otro». Un loco es alguien cuya voz la sociedad no desea escuchar, cuyo comportamiento es intolerable, que debe ser suprimido. Distintas sociedades aplican distintas definiciones de lo que constituye la locura (es decir, de lo que no tiene sentido). (...) Artaud fue extremadamente sensible a la función represiva del concepto de locura. Veía a los dementes como los héroes y mártires del pensamiento, encallados en la posición aventajada de la extrema enajenación social (y no simplemente psicológica), voluntarios de la locura, como aquellos que, mediante un superior concepto del honor, preferían volverse locos antes que abandonar una cierta lucidez, un extremo apasionamiento al presentar sus convicciones. En una carta enviada a Jacqueline Breton desde el hospital de Ville-Évrard en abril de 1939, después de un año y medio de los que serían nueve años de confinamiento, escribía: «Soy un fanático, no soy un loco». Pero cualquier fanatismo que no sea un fanatismo de grupo es precisamente lo que la sociedad entiende como locura.
Archivos adjuntos en Word y PDF: Imprimir y/o Leer
Ver en Blog de Alfredo Rubio-Bazán: "Arlequibre": http://www.arlequibre.blogspot.com

2 archivos adjuntos — Descargar todos los archivos adjuntos
Susan_ Sontag_CINCO.doc
479 K Visualizar como HTML Abrir como documento de Google Descargar
Susan_ Sontag_CINCO.pdf
982 K Visualizar como HTML Descargar

sábado, 20 de septiembre de 2008

RAVINES: LA LOGOMAQUIA DEL BOMBO DE ANTENOR

El documento de Eudocio Ravines, nos trae a colación algunas precisiones, una de ella es la figura del maestro Antenor Orrego, amigo de Vallejo, próloga a Trilce, posteriormente asume militancia en una organización pequeño burguesa en su filosofía y en su praxis; el Apra. Siendo editorialista de la Tribuna, etc, cometio el error de exagerar la ponderación a VR Haya. El Apra auroral que pretendio hacernos creer el doble caracter del imperialismo, el "bueno" que nos ofrece tecnología, inversiones, y por otro el imperialismo "malo", que oprime a los pueblos, ocultando de esta manera el caracter de clase del imperialismo, igualmente tener una visión incorrecta del desarrollo del capitalismo del Perú.

Otro aspecto relevante a comentar el estilo de polemica de Ravines, recordaremos que Gramcsi nos escribe que cultura socialista no es una gaveta de erudicción.

Un abrazo
Luis Anamaría


LA LOGOMAQUIA DEL BOMBO DE ANTENOR

ANTENOR Orrego fue largo tiempo considerado como el “Filósofo del Aprismo”.- El autobombo trujillano, cuyos parches fueron batidos en el periódico “El Norte” por una comparsa amiga y bohemia, consagraron a Antenor como una especie de Emerson, Kayserling y Berdiaeff trujillano.- La pobreza y chatura del ambiente consintieron tal consagración. Además, que Orrego literato y académico, no hacia mal a nadie con sus actitudes narcisistas.
Hoy se han trocado los papeles: Mientras Víctor Raúl se torna “filósofo”, Antenor se transforma en político, en padre conscripto, en representante con dos mil soles mensuales.
Antenor regresa en “La Tribuna” del martes 16 de octubre, “a sus primeros amores”.- Se calza sobre la nariz los espejuelos del comentarista y blandiendo en alto el mazo de su verbo lo descarga sobre el viejo parche del bombo trujillano.
Antenor badajea con saxofónico fervor, y con episcopal solemnidad, consagra a Víctor Raúl como “La Efigie de un Estadista”.- Y está bien la frase, porque al final de la loa en do mayor, no queda sino la efigie.
Es lástima para nuestra cultura y para el respeto que se merecen los jefes políticos peruanos, que el auto-bombo haya sido trasladado del mágico, veleidoso y alegre jardín de la literatura al terreno agonal de los políticos.- La caída en la más encarnecedora huachafería se hace tristemente inevitable. “Cada cosa tiene su tiempo y su lugar” decía el sabio Salomón.-

Aquello de que “el Perú asume con el pensamiento de Haya de la Torre, la rectoría espiritual del continente”, y de que las tres conferencias del Jefe Máximo “trazan y relievan una poderosa actitud constructiva en medio del caos que nos deja un mundo viejo que se ha derrumbado de raíz con el impacto de la guerra y en medio de desorientación de un mundo nuevo” constituye no sólo una exagerada lisonja, sino que sobrepasa las fronteras dejadas por aquellos que, en éstos países , ensalzaron y consagraron a nuestros Melgarejos.-
Quizás han cambiado las palabras y los personajes.- Pero, el espíritu, el nivel ético, la actitud humana, permanecen invariables.- Es la misma repugnante borrachera: la una de chicha, la otra de champaña.
Pero, en una democracia, cada se soporta políticamente como le place y en la forma en que cree servir mejor los intereses de su partido.- Por esto, reconocemos el derecho que tiene Antenor Orrego para quemar la cantidad de incienso que quiera ante las ojotas imperiales.
Lo necesario de refutar es la cancamusa filosofante que sirve de basamento a la exacerbada loa.
Según Orrego, Haya de la Torre ha incorporado, en una especie de “cocktail” incásico “la dinámica de Hegel, el jugo de las fuerzas económicas de Marx y el concepto orgánico de las culturas de Spengler”. No es cuestión aquí de analizar el hibrido.- De lo que se trata es de exhibir la monstruosidad, el maravilloso disparate, el diamantino absurdo que nos trae Antenor el filosofante, y gracias a cuál, “el Perú asume la rectoria espiritual del continente”.
¡Señoras y señores!
¡Astrofísicos, matemáticos, sacerdotes y filósofos!
¡Químicos, atomistas, espiritistas, magos y almas en pena!
Toda la discusión de más de dos mil quinientos años sobre la honda e inconciliable discrepancia entre Materialistas e Idealistas, no ha sido sino paparrucha de simplainas, que tuvieron la desdicha de caerse de la cuna.- Antenor afirma que “Materialismo y Espiritualismo son simples palabras”…

Los naturalistas de Mileto, Heráclito y los Eleáticos, el gran Demócrito, -el mayor y el más genial de los materialistas de la antigüedad y los sofistas; Platón y Aristóteles, sus grandes y magnificas luchas, no tienen ya validez alguna.- Desde el momento en que “gracias a la palabra ded Haya de la Torre, el Perú asume la rectoría espiritual de América”, todo ésto se vuelve polvo y ceniza.
Epicuro, Tito Lucrecia Caro, los estoicos, los escépticos, los neoplatonistas perdieron lamentablemente su tiempo discutiendo cuestiones que estaban predestinadas según el sr. Antenor, para que las liquidara con unas cuantas palabras mágicas, el verbo milagroso de Víctor Raúl.

El medioevo, con sus Abelardos y sus Avicenas, y sus teólogos y sus escolásticos; el Renacimiento con su Giordano Bruno, sus Campanella y sus candentes luchas que culminaban en suplicios y en hoguera.- Y luego aquella épica batalla que arranca desde Francis Bacon y Thomas Hobbes, hasta el Obispo Berkeley y David Hume.- Todo ésto es inválido. Todo eso ha sido superado por el verbo cantinflero del señor Haya.- Todo eso fue tonta y ridícula logomaquia.- Así lo dice el señor Antenor, al compás del tam tam selvático de su bombo sonoro, en homenaje a ese nuevo “Emperador Jones”.
Todo eso fue pérdida de tiempo.- Ahora, lo mismo da creer en la Teoría de los Quanta de PLanck, en la Teoría de la Relatividad, o en las almitas en pena, en los espíritus o en los aparecidos.- No hay ninguna diferencia.-
Gasendi, Descartes, Duns Scotto, los Enciclopedistas y Diderot, Enmanuel Kant, Fitche, Shelling y ese gigante entre los gigantes que se llamó Jorge Guillermo Federico Hegel, Ludwing Feuerbach y los positivistas y los agnósticos, los pragmatistas y los neo-hegelianos, todos ellos fueron pobres diablos que no lograron jamás entrever la cantinflica postura del “huevo de Colón” de la Filosofía.- Eso estaba destinado, por designio de Pachacamac al hijo predilecto de los Incas, Víctor Raúl.-

Carlos Marx, el titán, el único que sobrepasa a Hegel, Federico Engels, Nicolás Lenin han empleado su tiempo en pensar y en escribir logomaquias, como asevera el señor Antenor.- ¡Y todo esto, porque aún no había aparecido el verbo de Víctor Raúl!
¡Aparece!...Suena como la trompeta del Juicio Final, y el abismo entre Materialismo e Idealismo en Filosofía, se calma, se rellena, y toda discusión sobre el tema, se hace “logomaquia que no explica ni aclara nada”.- Ahora, después del Verbo de Pachakútec, desde el punto de vista cognoscitivo, vale tanto el principio del “Invariante” en Física, como el cuento de Blanca Nieves y los Siete Enanos. Es igual y no hay discrepancia alguna entre la existencia real del mundo sensible y la Ciencia que comprueba y ratifica esa existencia, y la escoba de las brujas desgreñadas que salen en las noches de luna creciente a dar su paseíto sobre los techos.

Así lo dice el señor Antenor, en nombre del Bhuda Viviente, Víctor Raúl.- De hoy en adelante, para que “El Perú asuma, con el pensamiento de Haya de la Torre, la rectoría espiritual del continente”, se acabó la discusión filosófica, y es obligatorio ponerle punto final, porque “Materialismo y Espiritualismo –dice el señor Antenor- son simples palabras que se resuelven a la postre en una logomaquia que no explica ni aclara nada”.
Logomaquia es un término rebuscado que quiere decir Discusión que versa nada más que sobre palabras; no sobre la esencia de las cosas, ni sobre su contenido o sobre el contenido del concepto.
Ante esto, tenemos que plantear unas preguntas simples al señor Antenor.
-Qué es primero: la Conciencia o el Ser Humano Viviente?. Qué fue primero: la idea o la Realidad Material?, ¿El Espíritu o la Naturaleza?. En palabras más concretas y cercanas de nuestra comprensión: ¿Qué fue primero: el altísimo concepto que Antenor tiene de Víctor o la cabeza pegada al cuerpo de Antenor?.-
Nadie que quiera conocer o hacer filosofía, puede evadir esta interrogante; la evasión no resuelve nada, ya que lo más que puede conseguirse es caer en un lamentable agnosticismo; es decir crear otro problema complicando el anterior.
De la respuesta que el señor Antenor o cualquiera, den a los interrogantes formulados, se desprenderá una posición filosófica neta: o se entrará en el Materialismo o se caerá en el Idealismo.- La cuestión no tiene salida, ni arreglo ecléctico, ni puentes verbales de absurdas logomaquias orreguianas.- Aquí es donde la Filosofía nos dice tajante e inexorablemente: ¡Ser o no Ser!.- Y es aquí donde no caben hamletismos, donde las evasiones solo sirven para mostrar la calidad y la hondura de las cobardías.-
El señor Antenor divaga, sueña como en un paraíso artificial, cree en aparecidos y en endriagos, cuando afirma que la discrepancia entre Materialismo e Idealismo en Filosofía, ha sido cancelada por su excelso lider.- Si quiere salir del ensueño, ensaye responder a las preguntitas arriba planteadas.-
En cuanto a la “Teoría clásica de Marx sobre el concepto de la Lucha de Clases” otro de los geniales inventos de Víctor Raúl, celebrados por el bombo y el bombardón del señor Antenor, nuestros lectores encontrarán un análisis en otro artículo de la presente edición.

ooooooooooooooo

viernes, 19 de septiembre de 2008

COLEGIO CESAR VALLEJO CUMPLE B0DAS DE ORO

danilo_sanchezlihon14@hotmail.com> escribió:

De: Danilo Sanchez
Asunto: 21-28 de septiembre. Colegio César Vallejo. Bodas de Oro.
Para:
Fecha: jueves, 18 septiembre, 2008 3:45



INSTITUTO DEL LIBRO Y LE LECTURA
INLEC DEL PERÚ
Y
CAPULÍ, VALLEJO Y SU TIERRA 21-28, SEPTIEMBRE 200850 ANIVERSARIO
DEL COLEGIO NACIONAL
CÉSAR VALLEJO BODAS
DE ORO
DE MI COLEGIO
PLAN LECTOR,
PLIEGOS
DE LECTURA
LUCERO
DELALBA
Danilo Sánchez Lihónwww.danilosanchezlihon.blogspot.com
1. Aparece una estrella
en el firmamento – ¡Ya se fundó el Colegio en Santiago!
Fue la exclamación que pronunció mi padre cuando un buen día llegó acesante hasta el portón de entrada de nuestra casa, con voz que la rapidez de la subida por las calles empinadas habían agitado, o la emoción y el júbilo que le embargaba:
– ¡Ya tenemos Colegio Secundario en Santiago de Chuco! –volvió a decir con su mirada dulce en que se empozaban las lágrimas.
Cuando le interrogamos más con los ojos, explicó:
– ¡Así se quedarán los jóvenes en nuestro pueblo sin tener que salir a otras ciudades! ¡Ya no arrancaremos con tanto dolor de nuestro costado!– ¿Y cómo se consiguió? –preguntamos para conciliar con emoción profunda le embargara.– Es obra de Romeo Solís, Carlos Barbarán y Andrés Camino. ¡Es un gran logro!– ¿Pero será cierto? –intervino mamá– ¡Porque tantas veces han dicho que ya se fundaba!
– Si es cierto. Ya llegó la Resolución. Habrá Secundaria en nuestro pueblo.
¿Qué había sucedido? Que ese día llegó a Santiago de Chuco la Resolución Ministerial 1461, del 19 de febrero del año 1954, mediante la cual se autorizaba el funcionamiento del Colegio Particular Mixto Santiago el Mayor para el primer ciclo de Educación Secundaria.
El proyecto había sido alentado día a día por dos entrañables amigos, Romeo Solís y Carlos Barbarán y apoyado decididamente por el joven juez Andrés Camino Carranza, hijo del ilustre hombre de letras trujillano, Carlos Camino Calderón. 2. Parecían pertenecer a otra esfera
y eso nos dolía e inquietaba Culminaba así la hazaña y proeza abrigada y acunada generación tras generación por muchos santiaguinos, soñada y anhelada por todos los senderos y atajos, en todos los poyos y fogones; porque los hijos antes se desgajaban del seno materno para ir a estudiar a Trujillo volviendo meses después añorantes y desvelados.
De allí que fue un día memorable cuando el 1 de abril de aquel año el colegio, inicialmente llamado Santiago el Mayor, abría sus puertas con 57 alumnos, 45 de los cuales eran varones y 12 eran mujeres, y se echaba a funcionar en la casa de la familia Santa María Calderón al pie del campanario. Inaugurar la Educación Secundaria en Santiago de Chuco, significó una transformación total de la vida de la provincia.
Porque antes, por ejemplo, cuando yo estudiaba Tercer Año de la Educación Primaria en la escuela 271, sentíamos admiración por aquellos que ya cursaban el Cuarto y Quinto de ese mismo nivel educativo, a quienes veíamos diferentes, desconocidos, transformados.
Eran completamente distintos los que hasta hace poco fueron chiquillos, quienes de un momento a otro cambiaban hasta en la manera de hablar, de estar de pie, de sentarse; hasta de jugar. Había en ellos un signo que hasta nos excluía. Otros temas y asuntos los embargaban. Parecían pertenecer a otra esfera y eso nos inquietaba para rápidamente llegar a esos grados en que ellos ya se desenvolvían. 3. Seres de otra categoría,
de fábula y leyenda De allí que cuando nos tocó cursar cuarto año de estudios del nivel primario sentíamos cómo los niños de menor edad y grado nos miraban, con enorme admiración y respeto, chiquilines que seguramente nos veían tal cual nosotros habíamos sentido antes, ver a los que nos precedían como futuros candidatos a ir a estudiar en un colegio de la costa, a orillas del mar, en la capital del departamento.
Porque las alternativas que se abrían al terminar la educación primaria eran: viajar a Trujillo a seguir estudiando para los que podían. Para quienes les era inaccesible pero eran aguerridos, la opción era irse a trabajar a Chimbote en la pesca.
La tercera disyuntiva era quedarse, que correspondía a los más humildes, pero ya en un rol y oficio de hombres hechos y derechos, aspecto que también otorgaba autoridad a quienes las exigencias de la vida les imponía asumir esos retos inaplazables.
Por eso, cuando en el mes de abril del año 1954 se dio apertura al Colegio Particular Mixto de Educación Secundaria Santiago el Mayor, nosotros pasamos a ser ojos y oídos extasiados.
¿De qué? De lo que acontecía entre esos muchachos mayores, apenas unos años más que nosotros, que modestamente seguíamos en la Educación Primaria y que por un golpe de encanto pasaban ellos a ser como seres de otra categoría, es más: de fábula y ficción. 4. Trazos de tiza
que la lluvia compasiva no borraba Así por ejemplo, de un momento a otro nos quedábamos con la boca abierta cuando en las piedras y hasta en los muros de las paredes aparecían trazadas unas curvas y ángulos salpicados de números. Dentro y fuera de dichas figuras, de círculos y líneas que los atravesaban, fórmulas y ecuaciones cuyos nombres aprendíamos y repetíamos como talismanes o como dijes en nuestros sueños.
A veces sus artífices se inclinaban caritativos hasta el nivel precario en que permanecíamos nosotros para decirnos que tales fórmulas mágicas se denominaban: raíces cuadradas, teoremas, hipotenusas.
Y, si estábamos mirándolos, mientras estudiaban esos muchachos bajo los faroles de la luz eléctrica, nos alelaba la manera tan fluida de cómo comprobaban entusiastamente la exactitud de una ley física o la fórmula cabalística de una composición química, dejándonos hechizados en una especie de sortilegio.
Fórmulas que se quedaban para siempre trazadas en la superficie seca de una piedra de la calle, que día a día nos acercábamos a mirarla como si de allí brotase una luz nueva.
Trazos de tiza que ni la lluvia, compasiva de nuestra ignorancia, borraba para calmar así la fiebre de nuestra pobre y zarandeada cabeza que no podía comprender la razón o sinrazón, el sentimiento o la ausencia de pasión de aquellos enigmas. 5. Un reino que los dotaba
de una nobleza y poder inusitados Los nombres de las materias y disciplinas eran otras tantas provocaciones a nuestra fantasía; algo peor que los nombres de los países extranjeros; o de los lugares exóticos de que hablan los mitos, o de realidades lindantes con lo divino de que nos habla lo místico.
Eran presencias casi mágicas y, sin duda, llena de vericuetos, de sitios intrincados pero también otros llanos y pródigos como son los pueblos, las ciudades y los planetas insólitos. Así, nótese en esta nómina de materias de las cuales jamás habíamos escuchado hablar antes y, sobre todo, imagínense la situación en que nos ponían al invadir abruptamente nuestra vida cotidiana: ¡álgebra, química, geometría, trigonometría!
Así pues eran asuntos, temas y contenidos a los cuales nosotros no estábamos acostumbrados. Aquello era lo que embargaba a esos jóvenes que no eran sino nuestros primos y hasta hermanos; pero que para nosotros de un momento a otro se habían hecho gente instalada en la estratósfera, ¡de un reino envidiable que los dotaba de una nobleza y un poder inusitados! 6. La fascinación de que ese podía ser
también el curso de nuestro destino Reinaba un nuevo espíritu y hasta las rutinas cambiaron.
La insignia del colegio era la cruz roja de cuatro aspas iluminada sobre un fondo amarillo de finos y severos bordes negros. Lucía no solo en el declive de sus hombros sino que fulguraba hasta en el telón interior de nuestros sueños.
La escolta del plantel secundario cuando marchaba portando sus estandartes era estupenda. Los partidos de fútbol que disputaba el Colegio era impresionantes, tanto el orden de las damas y los varones que alentaban a su equipo desde las tribunas con lemas dichos a coro, cuanto por los goles que se anotaban.
Todo enfervorizaba no solo por la belleza de las señoritas, o por el entusiasmo que ponían, o por la compostura dentro de sus uniformes de blusa blanca y falda azul marino, sino porque nos presentaba la fascinación de que ése podía ser también el curso que podía seguir nuestro destino.
Y, pese a que no éramos estudiantes secundarios todos nos convertimos en adherentes y fanáticos acérrimos admiradores de "nuestro" colegio, el primero en fundarse en el ámbito de toda la provincia. Nos invadía un orgullo profundo y hasta un sentimiento sublime al contemplarlos. 7. El anhelo de forjar una realidad mejor,
no soñándola ilusamente Todo en ellos era noble y exacto. En la calle una emoción profunda nos embargaba al ver pasar a aquel alumnado en formación hacia cualquier actividad. En las mujeres la manera compuesta en que lucían el uniforme, el guardapolvo que llevaban en el brazo. En los varones la corbata que llevaban puesta. La boina o cristina doblada al cinto. Los brazaletes en torno al brazo de quienes eran brigadieres.
Y es que el colegio sabía lo que representaba en cuanto a las aspiraciones más hondas y conscientes de todo un pueblo.
De allí que verlo verlos avanzar con paso marcial en cualquier parada militar era excelso. En primer lugar, nunca pensábamos que se pudiera desfilar en columnas y líneas tan parejas y perfectas y, en segundo lugar, poder hacerlo con tanto denuedo, convicción y virtud en el alma.
Otra faceta la presentaban los profesores, pertenecientes a una generación brillante de maestros, a un estilo de ser de hombres que anteponían a todo sus ideales, su anhelo de forjar una realidad mejor, no soñándola ilusamente sino haciéndola con sus manos y concretando con su esfuerzo obras de cultura que a la luz del tiempo y del recuerdo resultan memorables. 8. Todo el genio y la raza
de esos cerros, ríos y lagunas Pronto el colegio "Santiago el Mayor" se convirtió en un ejemplo en muchos órdenes de cosas. Y, pese a que era un proyecto particular y una sociedad anónima, para fundar la cual hubo necesariamente que contar con el aporte de capital que hiciera efectiva su instalación, sin embargo y desde el principio primó una concepción magistral visionaria de parte de sus tres fundadores.
La concibieron como una obra cultural, por un lado. Jamás como un proyecto lucrativo, tanto que cuando se nacionalizó el año 1958 en una actitud generosa y desprendida donaron todo el patrimonio al flamante colegio nacional.
Pero no solo eso sino que lo idearon como un proyecto inserto en el contexto social, imbricado a la realidad local y regional, diseñando un colegio representativo de las aspiraciones más auténticas y valiosas de toda la región.
Aquel era el primer colegio secundario de todo el ámbito provincial, al cual pronto vendrían a estudiar jóvenes desde Angasmarca, Mollepata, Mollebamba, Cachicadán, Citabamba, Quiruvilca y de todos los pueblos aledaños del ámbito de la provincia.
Fue mágica la presencia de los jóvenes en las actuaciones, en las efemérides, en los desfiles. Muchachas y muchachos que traían todo el genio y la raza –delicada e inabarcable– de esos cerros, ríos y lagunas. 9. La luna se oculta y vuelve
a aparecer por el horizonte Eso fue así. De tal modo que el mundo entero se sentía identificado con el colegio, hecho que se alcanzaba a lograr por esa capacidad de transparencia, sinceridad y sabia ponderación para recoger y hacer que aflore lo mejor de cada cual, actitud que era política institucional de parte de sus promotores.
Esa misma visión se puso de manifiesto en la conformación de la plana docente del flamante centro educativo, para lo cual no se dejó a nadie que lo mereciese fuera de una convocatoria amplia y generosa.
Tanto es así que el cura como el juez, el policía como el ingeniero, el militar como el economista, el agrónomo como el médico que trabajaban en las diversas dependencias, así como los profesionales y maestros más destacados en ésta o la otra especialidad, pasaron a conformar la plana docente del Colegio Particular Mixto Santiago el Mayor.
Aquello constituye un ejemplo que es importante tenerlo en cuenta a fin de corregir toda situación en la cual se vician los proyectos. Hay que hacer que de ellos participen no solo un círculo de allegados, empobreciendo toda gestión y deteriorando los diversos campos de actividad, sino toda persona .
Las estaciones se suceden, la tierra da vueltas, la luna se oculta y vuelve a salir por el horizonte una y otra vez, tantas que uno no se da cuenta de cómo el tiempo avanza. Así pronto estuve yo matriculado y asistiendo al Colegio Santiago el Mayor, como estudiante del primer año de la Educación Secundaria. 10. Traer piedras grandes,
así como árboles recién derribados Cuando ingresé, dos años después de fundado el Colegio, ya se habían acondicionado las habitaciones haciéndolas salones, construido carpetas y sillas, aún no habían mesas o pupitres para los profesores pero sí pizarras y una nutrida biblioteca.
Correspondió a la etapa en que yo ingresé hacer algo que no tenía: ¡el patio! En dicho objetivo tuvimos que levantar un terraplén interior, trazar una acequia y nivelar el terreno frente al amplio corredor del primer y segundo piso.
Para conseguirlo teníamos que traer piedras desde algunos sitios donde las había, y también plantar postes para el alumbrado. Con ese fin varias veces descendimos hasta la hondonada del río, por el Estadio Municipal para abajo, para traer piedras grandes, así como árboles recién derribados.
Trabajábamos por secciones o aulas, siendo entonces una competencia de fuerza y valor, cuando después de tomar un lonche apresurado en nuestras casas salíamos a encontrarnos en una esquina de la plaza, sitio de agrupamiento que habíamos fijado con el profesor encargado de guiarnos. 11. Y arropados con nuestras voces
llenas de entusiasmo Bajábamos al atardecer, casi a oscuras, hacia el lado profundo del río Patarata, al pie del estadio de fútbol, en donde se habían adquirido, o donde alguien había donado, árboles cuyas ramas teníamos que podar primero y luego, entre treinta o cuarenta muchachos, subirlos por la cuesta obstinada.
El cargar en nuestros hombros a esos dioses, resbalarnos en la tierra humedecida o en las hierbas, envueltos en los ruidos de los grillos y de los sapos que croaban a esas horas, a la luna y a las estrellas titubeantes me da la sensación y la idea y la visión de lo que para mí es un Colegio.
Y arropados con nuestras voces llenas de entusiasmo, de identificación entre nosotros mismos por las aventuras que corríamos, por las bromas y chistes que nos hacíamos entre compañeros.
Y así ganar casi rampando la cuesta, con el árbol creciendo hacia el cielo enternecido a partir de nuestros hombros ilusionados, me da la dimensión de lo que para nosotros era nuestro Colegio. 12. Grabado
de modo indeleble en el alma De noche entrábamos por las calles del pueblo cantando y haciendo hurras, paseando ese árbol todavía lagrimeante de savia de la tierra y aún con el rumor del viento y de los trinos de los pájaros en su corteza y en su tronco.
Llegábamos hasta nuestro local ya entrada la madrugada.
Nos abría el portón Quiterio Valencia, doctor en ingeniería pesquera graduado en Rusia, con quien habíamos estudiado en la escuela primaria y que ahora hacía de portero envuelto en un sacón impenitente y enrollado en una bufanda milenaria.
Un grupo de muchachas de nuestra sección, con algunas mamás, arropadas hasta el punto de no saber nosotros quiénes eran, nos esperaban con chocolate caliente, ¡yo no sé cómo hasta esa hora! y con panes y bizcochos desvelados.
Así, el privilegio de hacer uno mismo su propia morada educativa queda grabado de modo indeleble en el alma. 13. Hombro a hombro
y pulso a pulso con mis compañeros Nosotros hicimos nuestro propio colegio a pulso, a corazón pleno, con nuestros brazos y con nuestros sueños.
Era apasionante, por ejemplo, apisonar la tierra, coger el pico y la lampa; el lugar disparejo hacerlo llano, y encima de él erguirse para cantar el himno y saludar a la bandera.
Y como fue desde sus inicios un colegio mixto, es decir de chicos y chicas, ellas llenaban ese otro universo: el de la mujer, con sus secretos, sus labores singulares, sus miradas misteriosas, algunas que hasta ahora no descifro, sus rubores, sus candores, sus ingenuos y puros amores, marcando profundamente nuestras vivencias de adolescentes.
Así pues yo tuve la suerte infinita de estudiar haciendo mi propio colegio, con mis propias manos y con mis propios ideales. Mejor aún: hombro a hombro y pulso a pulso con mis compañeros, nuestros maestros y, aún mejor, con la gente esperanzada de mi pueblo. 14. Cumbres gélidas, punas extasiadas
y valles ubérrimos No nos habíamos dado cuenta pero había una tensión subyacente en el cuerpo directivo, cual era que el Colegio no tenía autorización para el funcionamiento de los grados superiores, de Cuarto y Quinto año.
Para solucionar esta situación el presidente de la Asociación de Padres de Familia, don Enrique Bocanegra, conjuntamente con el fundador y director del plantel, profesor Romeo Solís y Secundino Malca, viajaron a Lima para gestionar esa ampliación.
Producto del empeño de esa comitiva fue obtener la Resolución Ministerial de extensión al segundo ciclo y algo verdaderamente trascendental: la nacionalización del colegio con el nombre de César A. Vallejo, hecho que se efectivizó el año 1958.
De ese modo se constituía la primera institución educativa estatal de nivel secundario de toda la provincia, jurisdicción que abarcaba 3,337 kilómetros cuadrados, apenas diez veces menos pequeña que un país como Suiza de enorme gravitación histórica, social y económica no solo en Europa sino en el mundo.
El ámbito de nuestra provincia abarcaba quebradas de encanto, haciendas prósperas, legendarios asientos mineros, ríos ásperos y turbulentos, cumbres gélidas, punas extasiadas y valles ubérrimos. 15. Como el trigo de las lomas
y el valle tupido de rosas y margaritas El año 1958 significó una afluencia entusiasta y fascinada de estudiantes de los diversos distritos, caseríos, anexos y poblados, hecho que transformó la ciudad donde se veían ahora familias íntegras ingresando en sus cabalgaduras, con sus atuendos y vestimentas, con sus acémilas, monturas y aperos.
Bien los matriculados eran mozos de las minas de Quiruvilca, muchachos de las haciendas de Uningambal, Angasmarca o Calipuy, jovencitas de Citabamba a orillas del río Marañón, selva lejana y ya recóndita. De todos los lugares vinieron atraídas por la luz del saber.
En las casas, sea de la abuela sea de algunas tías, se empezaron a recibir a esos jóvenes pensionistas, quienes traían sus costumbres, sus historias, sus relatos, sus mitos, sus visiones del mundo como también sus acaeceres. Sus gozos como sus penas. También sus encomiendas con provisión de comidas que compartían con nosotros. Pero sobre todo su limpidez de altura, su candor, su ternura y su amor ferviente.
Niñas como flores fragantes de los campos; luz de abril, frescas como el trigo de las lomas y el valle tupido de rosas y margaritas.
El sueño de la gente de muchos lugares era pensar en Santiago de Chuco, en donde permanecían sus hijos. Y estando allí sentíamos que esas ilusiones nos atravesaban, nos encumbraban, haciéndonos nítidos y transparentes. 16. Ellos arrojaban sus gorras,
sus bufandas, y hasta sus chompas Hubieron delegaciones memorables en el tiempo en que yo cursé los cinco años de la educación secundaria. Tales fueron la del Colegio San Nicolás de Huamachuco y el San Juan de Trujillo. Pero entre todas ellas fue inolvidable la visita del Colegio Andrés Avelino Rázuri de San Pedro de Lloc, en septiembre del año 1956.
Se programaron actividades culturales, sociales, artísticas, deportivas y recreacionales. La presencia del Rázuri cambió el prejuicio que teníamos acerca de los jóvenes de la costa. ¡Qué distinción en el trato de aquellos muchachos, su don de gentes, su facilidad de palabra, el respeto y la cordura. ¿Se podía ser así siendo aún jóvenes! Estábamos deslumbrados.
Su preparación en los deportes era arrolladora, bajo la dirección de su profesor Carlos Maradiegue Aste. Tanto que nuestros equipos de básquetbol y fútbol, imbatibles en la provincia, solo atinaban a defenderse y tenían que hacer esfuerzos sobrehumanos y dejar el alma en tierra a fin de contenerlos.
Los despedimos una noche de guitarras en que había una multitud en la esquina del Hotel Santa María en donde doblan los ómnibus. Todo nuestro colegio voceaba sus nombres, uno por uno. Y ellos desde el ómnibus saludaban con las manos y los brazos.
Pero luego arrojaban sus gorras, sus bufandas, sus chompas que en el entusiasmo nuestras compañeras se desesperaban por cogerlas como tesoros invalorables. Cuando el ómnibus se alejó muchas lágrimas habían en las pupilas y me figuro que esos muchachos igual lloraban encogidos dentro de aquel ómnibus. 17. El ídolo era César Vallejo
y el eje el compromiso social Me tocó en suerte en aquellos años ver a una juventud seria, noble y enérgica, imbuida de ideales. Con aficiones por las ciencias y la literatura. En mi sección no había prueba en donde varios, casi niños, no disputaran la calificación de 20, en todas la materias.
Se cultivaba el ejercicio del pensamiento, del razonamiento, la lógica y oratoria. Los líderes eran jóvenes que destacaban como brillantes polemistas, disertadores y poetas.
A la hora del recreo en el patio se hacían círculos en donde se debatía sobre temas de actualidad y filosofía. Siempre la palabra lo tenían los estudiantes de los grados superiores. Nuestro ídolo en todo era César Vallejo y el eje de todo razonamiento el compromiso social. Y en lo que tocaba a nuestros propios destinos solo avizorábamos nuestra realización en el campo del espíritu.
Mucho de aquella actitud era el resultado del magisterio de jóvenes profesores santiaguinos que habían egresado de la Universidad Nacional de Trujillo, quienes inculcaban amor por el arte, la vida heroica y la identidad con nuestro pueblo.
Con Luis Santa María, hoy abogado, juez e importante erudito, director además de una importante revista de tema santiaguino, fundamos un periódico que se llamó El Parroquiano, donde me cupo escribir los editoriales siendo el primero un enjuiciamiento a la apertura del cinema municipal, su eficiencia, puntualidad y programación. 18. Piso una roca muy firme
bajo mis pies. Esa roca es mi colegio Me correspondió ser presidente de mi promoción el año 1959. Hicimos múltiples actividades para donar una biblioteca a nuestro plantel, propósito que lo logramos.
Después de la fiesta de de fin de año me despedí para venir a postular a la Facultad de Letras de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Hacerlo parecía un atrevimiento como egresado de un colegio de provincia recién fundado.
Cuando mi hermano pasó por la Casona del Parque Universitario para ver los resultados, saliendo de la Facultad de Medicina de San Fernando donde estudiaba, caminó luego hasta el correo central y puso un telegrama dándole a mis padres la buena nueva de que ocupaba el primer puesto en la lista de ingresantes en aquella vitrina.
Eran cerca de las siete de la noche y ya cerraban la oficina de correos en Santiago de Chuco. La noticia antes de llegar a mi casa se esparció por el pueblo. Cuenta mi madre que al recibir el telegrama mi padre ya se estaba acostando. Se levantó, se puso su mejor camisa blanca, su corbata y bajó a la plaza. ¡Él que no celebraba nada, ni siquiera su cumpleaños!
Encontró allí reunidos ya a mis profesores en torno de la pileta y su chorro de agua, quienes ya habían comprado una docena de avellanas que se elevaban con sus luces chispeantes haciendo luego retumbar el cielo con el estallido de la bombarda. En mi vida he tenido que afrontar muchas pruebas. Siempre he sentido que pisaba una roca muy firme bajo mis pies. ¡Esa roca es mi colegio!

Texto que puede ser reproducido
citando la fuente Teléfonos: 420-3343 y 420-3860 Revisar otros textos en el blog:
www.danilosanchezlihon.blogspot.co

martes, 16 de septiembre de 2008

MUJER FATAL, COMPAÑERA Y MADRE EN LA POESIA DE VALLEJO

Cc: fundacioncesarvallejo@yahoo.es

Me es muy grato hacerle llegar la invitación a la conferencia del día Jueves de Vallejo, sobre el tema "Mujer Fatal, Compañera y Madre en la Poesia de Vallejo", asi como el Boletín de Prensa sobre la conferencia del pasado Jueves 11 del presente.

Para cualquier información adicional, se servirá comunicarnos al teléfono: 424-5258 o E-mail: fundacioncesarvallejo@yahoo.es

Cordialmente,

Fundación César Vallejo
Dr. Narciso García Vallejo
Administrador General

lunes, 8 de septiembre de 2008

LA TEOLOGIA EN VALLEJO

PEDRO AUGUSTO MARQUINA PALACIOS

Av. Alfonso Ugarte 1002 Of. 504 Lima Telf. 424-5258
E-mail: fundacioncesarvallejo@yahoo.es
Invitación de Honor
Conferencia: “La Teología en la Poética de Vallejo”
La Fundación César Abraham Vallejo Mendoza, tiene el honor de invitar a usted al
Jueves de Vallejo, donde el Profesor Universitario, escritor y poeta, Pedro Augusto
Marquina Palacios , tendrá a su cargo la conferencia sobre el tema:
“La Teología en la Poética de Vallejo”
Día : Jueves 11 de Septiembre del 2008
Hora : 7:00 p.m. (hora exacta)
Lugar : Fundación César Abraham Vallejo Mendoza
Av. Alfonso Ugarte 1002 Of. 504 Lima
La Junta Directiva agradece su gentil asistencia.
Lima, 08 de Septiembre del 2008
Cesar Vallejo Ynfantes Néstor Vallejo Morales Oscar Vallejo Calderón
Presidente Secretario Tesorero